Casa Luz es un hogar para madres jóvenes y sus hijos que provienen de situaciones de abuso, pobreza extrema y explotación. Ubicada cerca de San José, Costa Rica, Casa Luz fue fundada en 2003 por Lori y Eldon Cooke, una pareja canadiense que se mudó a Costa Rica y abrió un hotel boutique y restaurante a principios de los 90. En 2017, se les unieron su hija y su yerno, Breanne y Jeremy Heide, quienes sintieron un llamado a dejar su hogar en Canadá, junto con sus dos hijos pequeños, se mudaron a Costa Rica para unirse al trabajo de Casa Luz.

 

Contamos con un equipo apasionado compuesto por: trabajadores sociales, maestros, psicólogos, consejeros cristianos y orientadores, madres que viven en el hogar, trabajadores de desarrollo infantil, personal administrativo y personal de cocina; que trabajan diligentemente para brindar a las madres y niños de Casa Luz el amor y las herramientas que necesitan para tener éxito.

 

El programa en Casa Luz se divide en dos etapas. Nuestra primera etapa acomoda hasta 16 madres y sus niños, y se enfoca en proporcionar restauración y educación. Una vez aquí, en un ambiente seguro y amoroso, las madres reciben el apoyo profesional que necesitan para sanar. Se les proporciona educación escolar interna, así como capacitación vocacional y para padres. Al ser madres tan jóvenes (algunas de tan solo 12 años) se presta mucha atención en ayudarlas a que aprendan cómo ser grandes mujeres y madres.

 

Nuestra instalación de apartamentos de etapa dos puede acomodar hasta 18 madres y sus niños. Para las familias con madres de al menos 16 años de edad que han completado con éxito el programa de la etapa uno, la segunda etapa ofrece una transición a la vida semi-independiente. El programa se adapta a las necesidades específicas de cada familia con un fuerte énfasis en la educación continua, el apoyo psicológico y emocional, la orientación espiritual y un programa preescolar integral. Estos continúan proporcionándose a medida que las familias avanzan hacia la independencia total.

 

En última instancia, nuestra oración por todas las jóvenes madres de Casa Luz es que sus corazones rotos se reparen y que encuentren la libertad de las heridas de su pasado; que cuando miren dentro de sí mismos verán belleza en lugar de cenizas, esperanza en lugar de desesperación y alegría en lugar de dolor.